En nuestra sociedad se han puesto de moda las famosas dietas milagro, que ponen en práctica muchas personas que quieren perder peso de forma rápida, perjudicando su salud. Aquellos que las hacen están poniendo en peligro tanto su salud física como mental, ya que se deseducan alimentariamente y, además, vuelven a recuperar esos kilos de forma rápida.
Cuando ponemos en práctica dietas milagro, empezamos a adquirir algunos mitos alimenticios, como pueden ser, por ejemplo, que los hidratos son malos, que no hay que mezclar hidratos de carbono con proteínas, que hay que eliminar los lácteos de la dieta, etc.
¿Qué son las dietas milagro?
El Grupo de Revisión, Estudio y Posicionamiento de la Asociación Española de Dietistas (GREP- AEDN) ha publicado una serie de reglas que nos permiten identificar de forma clara cuándo una dieta no es saludable:
- Nos aseguran resultados rápidos y mágicos.
- Prohíben el consumo de un alimento o grupo de alimentos.
- Cuentan con una lista de alimentos buenos o malos.
- Extreman la realidad científica de un nutriente.
- Recomiendan productos dietéticos a los que se atribuyen propiedades extraordinarias.
- Incluyen relatos, historias o testimonios para aportar credibilidad, y contienen afirmaciones que contradicen a colectivos sanitarios de reputación reconocida.
El riesgo para la salud de las dietas milagro
En muchos casos estas dietas milagro de las que os estamos hablando ponen en riesgo la salud de la persona que la practica, porque conducen a desequilibrios en el organismo. Las más peligrosas son las que conllevan un bajo aporte calórico, pues se suma el desequilibrio en la distribución de macronutrientes, y un bajo consumo de vitaminas y minerales.
Con las dietas milagro también se tiende a producir desequilibrios orgánicos debido a la ingesta de alimentos en calidad y cantidades erróneas. En la mayoría de los casos se baja de peso, pero no se pierde grasa, porque lo que expulsamos son líquidos, eletrocitos, proteínas corporales y reservas de glucóceno.
Todo ello es el resultado de que la bajada del aporte calórico no se puede hacer de una forma drástica, teniendo en cuenta que las dietas que no superan las 1200 calorías tienen que ayudarse de complementos vitamínicos.
Desde la farmacia os recordamos que es fundamental que antes de hacer una dieta consultéis con un profesional cualificado, y ésta se haga bajo su supervisión. Nuestro equipo está a tu disposición para resolver cualquier duda.
